En el oeste de Canadá, docenas de leones marinos que ingresaron a una granja industrial de salmón parecen negarse a irse incluso después de semanas de atiborrarse de pescado.

Los depredadores que parecen haberse infiltrado en la granja cerca de Tofino, Columbia Británica, no están llegando a ninguna parte, incluso después de varios intentos.

La granja es propiedad de Cermaq, que opera en Chile, Noruega y Canadá.

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A fines de marzo, estos depredadores eludieron redes y cercas eléctricas durante un “evento de ruptura” en la granja Rant Point, dijo el gigante de la acuicultura.

Los esfuerzos de la empresa para desalojar a los leones marinos han provocado reacciones negativas. Parece que usaron ruidos fuertes para asustarlos.

Las salidas también están disponibles para los animales “en caso de que decidan irse”, dijo la compañía.

Después de la primera brecha, varios leones marinos más se unieron a la incursión.

La compañía tiene como objetivo completar la cosecha de peces para la tercera semana de abril si a estos depredadores les queda algo.

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En el pasado, los lobos marinos atacaron otra piscifactoría de Cermaq. En ese momento, el Departamento Canadiense de Pesca y Océanos (DFO) autorizó a la empresa a disparar a los animales.

Pero ahora el DFO ha dicho que existe una “regla estricta” de que no se mata a los leones marinos.

(Con aportes de agencias)