El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva (PT) emitió un comunicado este viernes (17) condenando la decisión del Estado de Israel de legalizar nueve asentamientos en la región de Cisjordania, en un área administrada por el país desde 1967 como objetivo de una demanda palestina .

La nueva posición del Ministerio de Relaciones Exteriores representa un punto de inflexión en la diplomacia y contradice la posición de Brasil en los últimos cuatro años. Durante el mandato de Jair Bolsonaro (PL), el Palacio de Itamaraty se posicionó más favorablemente hacia Israel en el escenario internacional.

La nota oficial elaborada por Brasil fue difundida en conjunto con los gobiernos de Argentina, Chile y México, que tienen representantes de izquierda en la presidencia. El texto dice que las naciones “ven con profunda preocupación” las aspiraciones reveladas recientemente por el primer ministro Benjamin Netanyahu.

La legalización de los asentamientos se produce en respuesta a una serie de nuevos ataques palestinos contra el este de Jerusalén controlado por el Estado israelí. Al regular estas áreas, Netanyahu está cumpliendo su promesa de campaña de establecer el respeto por la soberanía israelí, en lo que sus críticos a menudo llaman “políticas expansionistas”.

La iniciativa de crear el posicionamiento de los cuatro países vino del gobierno de Lula a través de Itamaraty, y la nota conjunta fue posible en menos de 48 horas.

“Nuestros gobiernos rechazan cualquier acción que ponga en peligro la viabilidad de la solución de dos Estados en la que Israel y Palestina puedan compartir fronteras seguras y reconocidas internacionalmente respetando las aspiraciones legítimas de ambos pueblos de vivir en paz”, dijo en la declaración de Brasil. , Argentina, México y Chile.