(citar, agregar detalles)
LIMA, 20 jul (Reuters) – La Corte Suprema de Justicia de Perú condenó el lunes al expresidente Alberto Fujimori a 7 años y medio de prisión por entregar 15 millones de dólares en sobornos a su jefe de espionaje, la tercera vez que lo hace y se enfrenta a un rango de cargos desde su regreso del exilio en 2007.
Fujimori, quien tiene problemas cardíacos y cumple 71 años este mes, dijo a la corte que pagó a Vladimiro Montesinos porque temía que su mano derecha estuviera tramando un golpe de Estado en su contra.
Pero los críticos dicen que le dio a Montesinos el dinero para huir del país cuando el gobierno de Fujimori colapsó en un escándalo de corrupción en el 2000. Montesinos finalmente fue capturado en Venezuela.
“Este no fue un veredicto político”, dijo el juez César San Martín. “La decisión de hoy se basó puramente en los hechos”.
Fujimori dijo que apelaría el veredicto ante un panel separado de jueces de la Corte Suprema.
Durante su primer mandato, que comenzó en 1990, Fujimori fue elogiado por derrotar a la brutal guerrilla Sendero Luminoso y vencer la hiperinflación. Pero la opinión pública luego se volvió contra él por su estilo autocrático y una serie de escándalos de soborno.
Probablemente pasará el resto de su vida en prisión.
En abril, Fujimori fue sentenciado a 25 años de prisión por ordenar a un escuadrón de la muerte llevar a cabo dos masacres que mataron a dos docenas de personas a principios de la década de 1990 cuando su gobierno luchaba contra los insurgentes de izquierda.
Fue un caso raro cuando un ex presidente fue extraditado a su patria, juzgado y condenado por crímenes contra los derechos humanos.
Después de ingresar a Perú desde Chile en 2007, fue condenado a seis años de prisión por enviar agentes a robar documentos incriminatorios de la casa de la esposa de Montesinos.
A pesar de múltiples sentencias de cárcel, Fujimori todavía tiene cierta influencia política.
Las encuestas muestran que su hija, Keiko Fujimori, una congresista conservadora, es una de las favoritas para las próximas elecciones presidenciales en 2011.
Sus competidores incluyen a Ollanta Humala, un izquierdista que casi gana la carrera en 2006, y Luis Castañeda, el alcalde de la capital Lima. (Reporte de Terry Wade y Marco Aquino, editado por Sandra Maler)
“Amante de los zombis. Fanático profesional del tocino. Pensador exasperantemente humilde. Aficionado a la comida. Defensor de Twitter”.