Los incendios forestales en el centro-sur de Chile que han matado a 24 personas, destruido cientos de hogares y herido a miles, se extendieron a nuevas áreas este miércoles (8) después de cobrar fuerza durante la noche.

El gobierno brasileño aprobó el envío de un avión de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) equipado para combatir incendios, camiones cisterna, vehículos, equipos y materiales en un paquete de ayuda que podría sumar R$ 3,5 millones, dijo, luego de que el presidente Luiz Inacio Lula da Silva hablara con El presidente chileno Gabriel Boric.

Además, Brasil aportó brigadistas de los Ministerios de Justicia y Seguridad Pública y del Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático, así como especialistas en mando y control y comportamiento del fuego.

El área afectada por los incendios en Chile ahora cubre 294.058 hectáreas, un área cuatro veces el tamaño de Singapur, según funcionarios chilenos.

Unas 2.180 personas resultaron heridas y 1.180 viviendas quedaron destruidas, según las autoridades. La mayoría de las muertes y daños ocurrieron en las regiones del Biobío, la Araucanía y Ñuble, en el sur del país.

“El incendio forestal de 2011 quemó mi casa, todos los árboles, todo”, dijo Enrique Narváez a Reuters mientras observaba a los bomberos en Quillón trabajar para apagar el incendio cerca de su casa. “No quiero volver a pasar por eso”.

En Concepción, la capital de la región del Biobío y una de las ciudades más grandes de Chile, la gente cuidaba la vida silvestre, como pequeños venados heridos por los incendios.

“Se está haciendo un esfuerzo público tremendo”, dijo la secretaria del Interior, Carolina Toha, y agregó que había escasez de tanques de agua en todo el país.

“Hacemos un llamado a todos los proveedores de este tipo de equipos para que estén disponibles”, exigió el ministro. “La prioridad es llevar agua a las personas afectadas”.

(Reporte adicional de Juan González)

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