Chile recuerda este viernes (11) el golpe de Estado que derrocó al gobierno de Salvador Allende en 1973 e instauró la dictadura de Augusto Pinochet, aún con deudas en busca de verdad, justicia y reparación, dijo la presidenta chilena Michelle Bachelet.
A pesar de las expectativas de los grupos de derechos humanos y partes de la coalición gobernante, el discurso de Bachelet terminó sin ningún anuncio sobre una prisión especial para opresores, lo que fue recibido con la desaprobación de las familias de los desaparecidos.
“Siguen desaparecidos seres queridos cuyo paradero necesitamos saber, aún queda verdad por saber y justicia por aplicar”, dijo la mandataria de izquierda en el Palacio de La Moneda al presidir el homenaje al socialista Allende.
Bachelet llamó a “desmantelar los muros de silencio que nos impiden avanzar, aún quedan privilegios que el Chile de hoy no condona, la conciencia de Chile exige que se superen”.
“Voy a asegurar que se haga justicia igual para todos, es una obligación ineludible que asumo personalmente”, agregó el presidente, quien ha sido testigo de primera mano de la represión militar, lo que podría ser una referencia a las voces que piden el cierre. de la prisión especial.
Ubicada a 50 km de Santiago, la prisión alberga a cientos de exmilitares condenados por secuestrar, torturar y asesinar a más de 3.200 muertos víctimas de la dictadura de Pinochet (1973-1990).
Bachelet dijo que el país avanza hacia “más verdad, más justicia y reparación”, un futuro en el que la nueva subsecretaria de derechos humanos del Congreso juega un papel fundamental.
La presidenta, que se enfrenta a un índice de aprobación del 22%, el más bajo de todos los tiempos, según una encuesta publicada el viernes, usó el discurso para recordar que su país brindará refugio a las familias sirias ya que “los derechos humanos no conocen fronteras”.
El Gobierno de Chile confirmó este martes que trabaja en un plan para acoger a familias sirias afectadas por la crisis humanitaria que ha asolado su país.
El homenaje a Allende, quien se suicidó el 11 de septiembre de 1973, en medio del atentado a La Moneda, abre una jornada que incluirá varias conmemoraciones a las víctimas de la cruenta dictadura de Pinochet y sobre la que ya se han registrado incidentes: que repiten todos los años – en las afueras de Santiago.
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