Los reclamos de los conductores profesionales al gobierno chileno son antiguos. Estos incluyen: ajustes de flete; medidas de seguridad más eficientes en las vías con más paradas; Reducción del 30% y congelamiento de combustibles.

Dado que estas medidas nunca se cumplieron, este fue el detonante para el inicio de la interrupción del negocio. Por quinto día consecutivo, los camioneros bloquean las carreteras de Chile y se sienten cuellos de botella en varios puntos del país. Las manifestaciones se concentran principalmente en las regiones norte y central.

La situación actual en las calles se ve así: en algunos casos, los conductores bloquean completamente el camino; en otros casos ocupan carriles y en ocasiones imponen prohibiciones de circulación, dificultando el paso de vehículos y mercancías. Se han registrado varios puntos de bloqueo, particularmente a lo largo de la Ruta 5, que atraviesa el país de norte a sur.

Los comerciantes chilenos ya están expresando gran preocupación por la situación. A algunos supermercados ya les falta un producto específico para ofrecer a sus clientes.

Según Cristián Allendes, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, “Esta movilización nos complica porque se da justo al inicio de la temporada más importante de cosecha y exportación de frutos que son fundamentales para la alimentación y los ingresos del país”.

Según la prensa chilena, Cristian Sandoval, presidente de la Federación Sindical de Empresas de Transporte de la Fuerza del Norte, ya había tenido reuniones con el gobierno, que le había prometido soluciones en poco tiempo. La fecha límite ha pasado y no se ha tomado ninguna acción.

Según los manifestantes, el movimiento se mantendrá hasta que el gobierno chileno tome medidas satisfactorias.

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