Uno de ellos fue Jorge Selume Zaror, ex director de presupuesto del régimen de Pinochet, quien dirigió la facultad de economía de la Universidad de Chile, la institución académica pública más antigua e importante del país, a principios de los años ochenta. Invitado por él, Guedes recaló en este centro de estudios para trabajar como investigador y académico, al igual que Robert Mundell y Edmund Phelps al mismo tiempo, según la revista chilena. Ciudad capital – quien recibió el Premio Nobel de Economía en 1999 y 2006 respectivamente.
“Hasta donde yo sé, estuviste aquí en la Universidad de Chile. No sé si fueron años o tres meses”, dijo al diario chileno. La TerceraRolf Luders, de la primera generación chicos de chicago, uno de sus principales representantes, Ministro de Hacienda y Economía, Fomento y Reconstrucción entre 1982 y 1983. En septiembre pasado, el economista Ricardo Paredes escribió en Twitter: “El economista jefe de Bolsonaro, Paulo Guedes, es un estudiante de posgrado de Chicago y trabajó en el Departamento de Economía en la Universidad de Chile a principios de la década de 1980. lo recuerdo como un capo [um craque]aunque al igual que Bolsonaro, es aterrador”.
El periodista chileno Cristián Bofill, experto en política brasileña, dice: “Cuando Guedes volvió de Chicago Brasil Con su doctorado se sintió marginado en Brasil. Los economistas que ostentaban la hegemonía en ese momento no le dieron ni los cargos académicos ni los cargos gubernamentales que creía merecer. Luego, en la década de 1980, se trasladó a Chile, donde fue reclutado por Selume. Quería ver las reformas de primera mano chicos de chicago anunciados en el país”.
Según Bofill, todo indica que el proyecto de Guedes siempre ha sido hacer en Brasil lo que hizo en Chile el economista Sergio de Castro, asesor del Consejo Militar desde 1973, luego ministro de Economía y Finanzas y principal artífice de la implantación del modelo junto con los otros economistas de Chicago: “Toma un país económicamente mediocre, introduce reformas con tendencias neoliberales, dale un impulso al país, y al final es más exitoso que tus propios oponentes adopten el modelo” liderado con la llegada de la Democracia a través de el concierto de centroizquierda”.
Cuando Guedes llegó a Santiago, “fue el mejor momento para chicos de chicago‘, informa la periodista Carola Fuentes, quien junto a Rafael Valdeavellano estrenó en 2015 la película homónima, en la que los protagonistas de las reformas de Pinochet cuentan los cambios que provocaron en Chile y su legado que perdura hasta el día de hoy. el director de chicos de chicago informa que ocuparon cargos secundarios como asesores técnicos a principios de la dictadura. En marzo de 1975, sin embargo, Friedman visitó Chile: “Allí convenció a Pinochet y le dijo la famosa frase de que hay que tomar medidas radicales, que es mejor cortarle la cola al perro de una vez que de un tirón”.
Básicamente un estatista, como la mayoría de los soldados chilenos de su época, Pinochet vio a este grupo de tecnócratas con recelo. Pero poco después de hablar con Friedman, decidió darle espacio al tema chicos de chicago hacerse cargo de la economía chilena. “A partir de ese momento pasaron a ocupar la primera línea de los ministerios y de diversas instituciones como el banco central, facilitándoles la toma de decisiones. No hubo resistencia a sus medidas radicales, que no podrían haber implementado en una democracia”, dice Fontes.
En la película chicos de chicagoRicardo Ffrench-David, economista chileno formado en Chicago pero crítico con la dictadura y la gestión de sus compañeros universitarios, dice que “las políticas económicas de 1973-1982 fueron un ejemplo seminal del extremismo neoliberal en el mundo”. Fuentes los detalla: libertad de precios, apertura económica y recortes de impuestos, privatización de empresas estatales y reducción del Estado, y adoctrinamiento de la población.
En 1982 el chicos de chicago Fueron expulsados del frente poco después de la devaluación del dólar mundial (habían fijado el tipo de cambio en 1979), pero fueron sucedidos por otros economistas que no cambiaron el modelo en absoluto. Entre ellos José Piñera, hermano del actual presidente chileno, ministro de Pinochet y creador del sistema chileno de seguridad social basado en la capitalización individual. Lo implementó a principios de la década de 1980, justo cuando Guedes vivía y trabajaba en Chile.
Bolsonaro quiere reemplazar el sistema de pensiones distribuidas por un sistema de capitalización, siguiendo los pasos de lo que se hizo en Chile con Pinochet. Onyx Lorenzoni, su posible jefe de gabinete, no oculta su admiración por el modelo a seguir chicos de chicago Los chilenos han implementado: “Para nosotros, Chile es un ejemplo de un país que ha establecido elementos macroeconómicos muy sólidos que lo hacen un país completamente diferente a toda América Latina”.
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