AMÉRICA/CHILE – Nuevas autoridades deben ver la migración “como una realidad humana que exige protección, no exclusión”

Santiago (Agencia Fides) – “En este momento de elecciones y con la introducción de nuevas leyes de inmigración, nos preocupa que la persona no sea vista como un eje de justicia, sino que la migración esté relacionada con la seguridad, para limitar la movilidad de las personas o para fines electorales”. Así lo indica el documento elaborado al término del encuentro nacional de Delegados para la Pastoral de la Movilidad Humana de todo Chile y el Instituto Católico Chileno para las Migraciones, INCAMI, que se desarrolló del 30 de noviembre al 2 de diciembre.
El texto, firmado en nombre de todos los delegados por Monseñor Moisés Atisha Contreras, Obispo de San Marcos de Arica, Presidente del INCAMI, subraya: “Nos preocupa la situación de los migrantes que buscan una vida mejor en nuestro país tiene condiciones para ellos mismos y sus familias, o quienes huyen de situaciones inseguras pero no encuentran las condiciones para un proceso de integración digno o ven agravarse situaciones de peligro”.
El comunicado público enviado a Fides reitera el llamado a un proceso de integración de las personas que ya viven en Chile que “garantice la posibilidad de acceder a derechos como la reunificación familiar y los derechos de los niños construyendo puentes, no muros”. El texto pide “procesos de gestión y comunicación migratoria definidos y transparentes” y también espera que “el nuevo gobierno vea la migración como una realidad humana que en nuestro contexto requiere protección y no exclusión”.
La digitalización de los trámites de extranjería no ha mejorado la gestión de permisos de trabajo y visados, que “cada vez son más tediosas y burocráticas”, subrayan. Es preocupante la vulnerabilidad que pueden encontrar las personas de Venezuela y Haití, incluidos los niños, muchos de los cuales nacieron en Chile. También es preocupante la situación de los niños y niñas que actualmente viajan al continente con personas distintas a sus padres o tutores legales con miras a su reunificación en Chile.
Por último, pide “revisar y evaluar la aplicación de la legislación sobre refugiados (20.430) para garantizar la protección de los solicitantes facilitando el acceso al menos previa solicitud. La entrada no autorizada no es solo motivo de preocupación”. por su migración irregular y la dificultad de cambiar esta situación, pero también por los desplazamientos a los que están expuestos.” (SL) (Agencia Fides 12/03/2021)

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